Ingredientes:
- 3 Huevos
- 250 gr. de azúcar
- 200 ml de leche
- 1/2 copa de anís seco
- 200 ml de aceite de girasol.
- Ralladura de naranja o limón
- 1 kg. de harina floja (normal o de repostería)
- 1 sobre de levadura royal
Elaboración:
Primero mezclamos bien los huevos, el azúcar, la leche, el anís, y aceite y la ralladura. Vamos integrando cada ingrediente de uno en uno.
Mezclamos la levadura con la harina y la añadimos a la mezcla anterior. Trabajamos hasta obtener una masa homogénea.
Para mí, esta ha sido siempre la parte más complicada... En muchas recetas pone: "añadir la harina que admita la masa..." Y como sabemos cuanta harina admite??? Pues bien, creo que esto sólo se aprende a base de hacer y hacer... Pero bueno, en este caso, con el kilo de harina queda bien.
Al final queda una masa blanda pero que se puede trabajar. (ya no esta pegajosa...).
Dejar reposar la masa cubierta con un trapo durante una hora aproximadamente. Con esto conseguimos que la levadura "actúe" y queden más esponjosas por dentro.
Y luego a formar las rosquillas. Cogemos pequeñas porciones y les vamos dando forma de rosquilla.
Freír en abundante aceite. Yo uso el resto de la botella de aceite de girasol. El aceite no tiene que estar muy caliente pero tampoco frío....
Una vez fritas pasar las rosquillas calientes por azúcar en grano, si se quiere. Yo he probado a no pasarlas por azúcar, pero en casa les gustan más con el azúcar, así que...... mandan ellos!
Y nada, luego a comerlas como rosquillas!!!
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